Hoy en nuestro blog queremos recordar la figura y el trabajo de uno de los pioneros del diseño en España: Manolo Prieto, padre de uno de las imágenes más icónicas de nuestro país, el Toro de Osborne.
Manolo Prieto: el creador de símbolos
Manolo Prieto nació en 1912, en Cádiz y falleció en Madrid en 1991, después de una larga y exitosa trayectoria como diseñador, pintor y dibujante. Aunque, sin duda, su carrera se ha visto marcada por su mayor triunfo: el toro de Osborne.
Manolo Prieto dio muestras de una precocidad excepcional cuando con 16 años comienza a trabajar como dibujante en un periódico local del Puerto de Santa María, su ciudad natal, gracias a una serie de caricaturas de personajes populares.
Prieto compatibiliza ese trabajo con sus estudios en la Academia de Bellas Artes de Santa Cecilia, en Cádiz, y en 1930 se traslada a Madrid, donde desarrolló su carrera profesional.
Manolo Prieto cultivó numerosas disciplinas plásticas: anuncios publicitarios, carteles, ilustraciones, diseños gráficos, portadas de libros, pintura al óleo e incluso se convirtió en un reconocido escultor de medallas.
Como diseñador gráfico para publicidad, trabajó antes de la Guerra Civil en la agencia Publicitas. A pesar de su militancia republicana, tras la contienda fue nombrado Director Artístico de la agencia de publicidad Azor, cargo que ostentó durante casi 30 años.
El estilo de Manolo Prieto
Prieto dominaba diferentes aspectos de la comunicación visual y el diseño gráfico de una manera casi instintiva. Para él la composición o la construcción tipográfica eran algo natural. Además, los anuncios de Prieto tenían un estilo muy marcado por el sentido del humor e incluso toques de surrealismo.
Su larga y exitosa trayectoria le hicieron merecedor de más de 40 premios nacionales e internacionales y su obra está expuesta entre otros en el Museo de Arte Moderno de Nueva York
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Primera valla del Toro de Osborne, diseñada por Manolo Prieto.
El Toro de Osborne: su gran triunfo
Aunque al final de su carrera lamentó que el toro de Osborne eclipsara al resto de su obra, no cabe duda de que el trabajo de Prieto para la bodega jerezana ha traspasado el ámbito de lo publicitario para convertirse en el símbolo de todo un país.
En 1956, el diseñador presenta a los directivos de Osborne su idea para sus carteles de carretera. En un primer momento la idea no convenció a los clientes, pero insistió hasta conseguir una prueba. Y de ahí, a la leyenda.
La silueta del toro de Osborne, fabricada en chapa metálica y con un tamaño de 150 metros cuadrados, se ha convertido en el logo oficioso de España. De hecho, es «patrimonio cultural y artístico de los pueblos de España», según una sentencia judicial que permite que permanezca en su ubicación, pese a incumplir la ley que regula las vallas publicitarias en carreteras.
Para más información podéis visitar la web de la Fundación Manolo Prieto, que se encarga de gestionar el patrimonio artístico de Manolo Prieto, que tienen alrededor de 3.000 piezas catalogadas y distribuidas en obra gráfica (bocetos, carteles, ilustraciones, campañas publicitarias), obra plástica (pinturas, dibujos) y escultura de medallas (bocetos, galvanizados, escayolas, medallas).
